Es muy frecuente en la consulta médica, que al interrogar al paciente respecto de su actividad física, la persona nos relate desde su perspectiva que entrena “X” veces por semana, en un gimnasio por "X" horas. Acto seguido pregunto cuántas veces pudo concurrir al gimnasio la semana que pasó, y la respuesta es “ninguna”, porque hace semanas o meses que no va por algún motivo ( porque me mudé, porque cambié de trabajo y estoy viendo la posibilidad de cambiar horarios de entrenamiento, porque en vacaciones no voy, etc.).
En su percepción errónea es como si nunca hubiera dejado.
Este discurso es muy común y se corre el riesgo de pensar que al regresar al gimnasio, el cuerpo tiene memoria, y se puede continuar con la misma rutina de ejercicio que antes de dejar. El riesgo de lesiones crece exponencialmente.
El entrenamiento corporal debe ser progresivo cada vez que retomamos. Es decir recomenzar de a poco la actividad ya que las cualidades físicas se pierden también progresivamente y a gran velocidad.
Lo mismo sucede con personas que (luego de terminada la etapa escolar primaria y secundaria donde la actividad física es obligatoria) sólo se reúnen con amigos el fin de semana, en el club, para jugar tenis, futbol, u otro deporte competitivo sin realizar el entrenamiento específico durante la semana.
Estos son los pacientes que en Medicina del Deporte denominamos domingueros. Obviamente, son las personas que tarde o temprano se lesionan y luego entran en ese círculo vicioso de sedentarismo-vuelta al ejercicio- lesión-sedentarismo.
Es importante tomar conciencia de que el cuerpo debe ser entrenado en forma constante (mínimo 3 veces durante la semana para poder realizar actividades competitivas).
La categoría competitiva es muy amplia y no se refiere solamente ser profesional, sino también incluye al amateur. Es decir aquel que se fuerza por llegar a una pelota, o a una marca determinada, también es competitivo.
Por lo tanto, por más que juegue con amigos tarde o temprano se va a lesionar si no tiene un soporte de entrenamiento específico para ese deporte.
TIPS para aquellos que deseen jugar una vez por semana a algún deporte competitivo:
· Recordar que el cuerpo pierde las cualidades físicas más rápido de lo que se piensa (fuerza, resistencia cardiovascular, elongación) aunque las habilidades motoras coordinativas se recuerden por mas tiempo.
· Retomar el entrenamiento en forma progresiva (siempre bajo supervisión idónea)
· Entrenarse mínimamente 3 veces por semana, si es que se va a realizar algún juego competitivo el fin de semana.
· Pedir chequeo deportológico anual. Esto es tarea tanto de las instituciones deportivas, como de cada persona individual (análisis clínico y cardiológico)
· Ser conciente del paso del tiempo (la edad), para graduar el entrenamiento y el esfuerzo.
· Si no tenemos el tiempo para entrenar, elegir una opción no competitiva (bailar, bicicleta, trotar, caminar, nadar). Y recordar que poco es mejor que nada.
Cuidarnos, no es un pretexto mas para NO realizar movimiento.
Dra. Patricia Silvana Minuchin