Sobre edulcorantes y otras hierbas.

 

  

 

Es común utilizar o consumir dentro de ciertos alimentos o bebidas edulcorantes.

Edulcorante significa: lo que endulza. Razón por la cual el azúcar o la miel son también edulcorantes (calóricos por cierto).

Cuando leemos la información nutricional de los alimentos y bebidas que compramos, nos llevaremos una sorpresa por el azúcar o jarabe alto en fructosa que contienen, aún los light o diet. Incluso, algunos edulcorantes dicen con letra grande estevia y con letra chica sacarosa (o sea, azúcar).

La pregunta del millón: ¿Son sanos?.

La respuesta no la tengo, ya que lamentablemente, vaya a saber el motivo, no hay muchos trabajos científicos al respecto.

Pero podemos saber que el ciclamato de sodio, la sacarina sódica (tienen sodio peligroso para hipertensos), el acesulfame K (este último prohibido en EE. UU.), son moneda corriente.

El aspartame no se puede calentar ni usar en bebidas calientes (té, mate café). Nunca nos contaron el por qué, ni siquiera en su lanzamiento, hace muchos años y ante mi insistente pregunta.

Hoy se usa la estevia (estevia rebaudiana), edulcorante milenario, antiguo azúcar paraguayo, que lamentablemente, la mezclan con otras cosas (letra chica).

La sucralosa edulcora y hasta ahora no hay efectos adversos.

Igualmente, debemos saber que todo es cuestión de cantidades y no se debe exagerar con nada. Hasta la miel natural en exceso es perjudicial…

 

 TIPS:

  1. Leer información nutricional

  2. Elegir de acuerdo a cada caso

  3. Tener en cuenta que existen más intereses comerciales que intereses de salud, al ir a la góndola de los supermercados o las dietéticas, cuyos dueños creen saber de nutrición

  4. No todo es para todos (depende de tus gustos, preferencias, posibilidades, enfermedades previas, etc.)

  5. Consultar con tu especialista en Nutrición.

 

Esta es la verdad, para que cada uno de los lectores tome su propia decisión a la hora de elegir. Y que nadie elija por “mí”.

 

 

 

Dra. Patricia S. Minuchin